Aventuras

Banco Chinchorro es el atolón de coral más grande del hemisferio occidental, está en la lista de loz buzos más experimentados. Se ha ganado una reputación como uno de los últimos destinos de buceo vírgenes en este lado del mundo. Se beneficia de ser remoto, inaccesible y con acceso que requiere permisos especiales del Gobierno de México.

Realmente no hay palabras para explicar lo que se siente explorar Banco Chinchorro, saber que probablemente sea el único barco de buceo que se encuentre en el área y pueda sumergirse en un atolón que se extiende 600 millas cuadradas (menos del 1% está por encima del agua) que ha sido testigo casi 200 restos de naufragios que datan del siglo XVI. Es uno de esos lugares cuya belleza e inmensidad es abrumadora.

Banco Chinchorro se encuentra a 36 millas náuticas a mar abierto desde nuestro muelle en Xcalak, la ciudad más antigua de la costa del Caribe Mexicano, lo que hace que sea un desafío ir a Chinchorro casi todos los días, siendo los meses de verano los más adecuados para el viaje.

Las expediciones a Chinchorro están condicionadas, primero, por el clima -es importante que las condiciones del mar sean buenas- y, segundo, por el numero de buceadores -se necesitan un grupo mínimo de cinco buzos-.

Si el el tiempo lo permite, podrán visitar una laguna llena de cocodrilos, conocer las iguanas gigantes endémicas y recorrer senderos especialmente diseñados para admirar la naturaleza del lugar.

El atolón tiene fama por el coral negro, sus tiburones gata, sus tortugas, sus cocodrilos, sus langostas y sus caracoles rosados, aunque, además, posee yacimientos arqueológicos en forma de barcos hundidos. Un cementerio sumergido que alberga un total de 69 buques históricos desde el siglo XVI hasta la actualidad.

Puntos de inmersión:

CORAL NEGRO
Es la inmersión imprescindible si es la primera vez que se visita el lugar. Localizada en la zona noroeste del atolón, se trata de una ligera pendiente de arena donde sobresalen grandes estructura de coral. La vida marina es abundante y la profundidad media del buceo de 20 m.

GINGER SOUL
Cuando el mar lo permite se puede ir a ver este naufragio situado en la zona este del atolón. Se trata de un carguero, un barco de vapor del siglo XIX, que aun conserva toda su maquinaria distribuida por un arrecife sano y limpio poco profundo. Lo mas famoso: su gran hélice.

EL ACUARIO
Como no podía ser de otra forma, Chinchorro también tiene su acuario, un lugar lleno de vida marina en la que el escenario predominante es la combinación de arrecife de coral con la arena blanca. Los tiburones gata suelen ser habituales aquí y muy curiosos.

40 CAÑONES
Es el naufragio más famoso de Chinchorro. Un navío de guerra del siglo XVII hundido -quizá a causa de una batalla- en un arenal a ocho metros de profundidad. La madera del barco ya ha desaparecido pero aun se conserva una treintena de grandes cañones de bronce.

SANTA TERESITA
Se trata de una hermosa pared de coral, muy empinada pero no muy profunda (unos 17 metros de máxima). En ella es habitual ver morenas, langostas, meros, peces loro y tortugas. Si observamos detenidamente el azul es posible que veamos algún tiburón pasar a media agua

CALDERAS
Se trata de otro naufragio que se localiza en la zona norte, muy cerca de Cayo Lobos -donde hoy hay una base naval-. Es un mercante del siglo XIX también movido a vapor y que es famoso por su enorme caldera que casi sobresale del agua. Es una inmersión tranquila y poco profunda.

Ven y disfruta de los sitios bajo el agua más prístinos que el Caribe puede ofrecer! Además de ser un paraíso de coral blando y coral endémico, notarás que la vida marina se acerca más de lo común debido a que muchos de ellos nunca han visto un buzo antes! Una situación perfecta para fotografiar vida marina.

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